lunes, 13 de noviembre de 2017

Es topa


Invito a mis hijos a aprenderse de memoria a Antonio Machado:

Se miente más de la cuenta 
por falta de fantasía: 
también la verdad se inventa.

Quique recuerda mejor otros versos que, por lo visto, les enseñé yo alguna vez:


El hombre es fuego, 
la mujer, estopa, 
viene el diablo 
y sopla.

Misterios del subconsciente, a los niños les interesan mucho más estos versos que los de Machado. Carmen dice: "Uhhh, yo soy fuego". Quique la corrige: "El fuego soy yo, tú estopa". Carmen pregunta: "Y eso, ¿qué es?" Su hermano, cargado de razón, le explica: "Es topa, la mujer del topo".

Yo veo que hay un añadido estético muy valioso al hecho de aprenderse unos versos sin saberse su significado. Por el puro gusto estético del ritmo y de la rima. El viejo refrán, al que siempre le vi mucha chispa, me ha incendiado para siempre.


2 comentarios:

Josefina dijo...

¡Son geniales esos dos!

AFD dijo...

He de decir que mi gusto se alínea con el de ellos.